[fusion_builder_container hundred_percent=»no» equal_height_columns=»no» menu_anchor=»» hide_on_mobile=»small-visibility,medium-visibility,large-visibility» class=»» id=»» background_color=»» background_image=»» background_position=»center center» background_repeat=»no-repeat» fade=»no» background_parallax=»none» parallax_speed=»0.3″ video_mp4=»» video_webm=»» video_ogv=»» video_url=»» video_aspect_ratio=»16:9″ video_loop=»yes» video_mute=»yes» overlay_color=»» video_preview_image=»» border_size=»» border_color=»» border_style=»solid» padding_top=»» padding_bottom=»» padding_left=»» padding_right=»»][fusion_builder_row][fusion_builder_column type=»1_1″ layout=»1_1″ background_position=»left top» background_color=»» border_size=»» border_color=»» border_style=»solid» border_position=»all» spacing=»yes» background_image=»» background_repeat=»no-repeat» padding_top=»» padding_right=»» padding_bottom=»» padding_left=»» margin_top=»0px» margin_bottom=»0px» class=»» id=»» animation_type=»» animation_speed=»0.3″ animation_direction=»left» hide_on_mobile=»small-visibility,medium-visibility,large-visibility» center_content=»no» last=»no» min_height=»» hover_type=»none» link=»»][fusion_text columns=»» column_min_width=»» column_spacing=»» rule_style=»default» rule_size=»» rule_color=»» hide_on_mobile=»small-visibility,medium-visibility,large-visibility» class=»» id=»»]
LAS SOMATIZACIONES
La rabia es la emoción que nos llena de vitalidad. Es un torrente de energía que si no expresamos, acabará congelando nuestra respuesta vital creando enfermedades. Si te niegas un desahogo, momentos de ira o de placer, producirás un sentimiento de profundo resentimiento con el que convives un tiempo hasta que en un momento dado, la enfermedad aparece.
El no expresar rabia ante la mentira, la manipulación, el abuso, la traición, equivale a no reaccionar, entonces, tu cuerpo lo hará por ti en forma de somatizaciones. Estas afecciones son emociones interiorizadas, no canalizadas ni expresadas, que congelan nuestra energía y vitalidad. La mayoría de las enfermedades tienen su origen en la mala ejecución de la rabia.
Estas enfermedades, excluidas las de origen genético o desgaste por la edad, son llamadas de auxilio. El cuerpo nos indica que así no puede ni quiere seguir. Si no atendemos a las señales, nuestras dolencias irán complicándose hasta convertirse en enfermedades graves. Un estudio realizado en EE.UU. revela que más del 50% de los fallecimientos que se producen cada año en ese país se deben a enfermedades de origen psicosomático.
– Resfriados y gripes. Siempre responden a una pérdida, que no se reconoce ni se asume, sintiendo falsa rabia en vez de tristeza. Una amiga tiene gripes constantes, sale de una y empieza con otra. Su cuerpo le está diciendo que no quiere esa vida llena de trabajo sin descanso, que pare y piense lo que está perdiendo. Mientras no lo haga, la situación de gripes continuas no cesará.
– Dolores de estómago, de cabeza, problemas de digestión. Es el caso contrario al anterior. Ante una situación en la que se debe expresar rabia (por un abuso, traición o mentira), la persona se resigna con tristeza conformista que le impide pasar a la acción. El cuerpo lo que dice es: “no me trago esta mentira, reacciona, si no vas a estallar”.
– La diarrea, es una expresión de la rabia. Cuando has eliminado un engaño de tu vida, el cuerpo la desaloja. El . estreñimiento es lo contrario, no expulsas las mentiras y el cuerpo “aprieta las nalgas”.
– Dolor de garganta. No exteriorizas lo que necesitas decir. Tragas y encajas el enfado. Miedo falso en vez de rabia. Las palabras almacenadas se quedan en tu garganta y te queman.
– Estrés. Los sentimientos de resentimiento, rencor y deseos de venganza engendran hormonas del estrés que se convierten en auténticos venenos para el organismo. Es falsa rabia en vez de tristeza.
– Psoriasis y eccemas cutáneos. Es un falso miedo paralizante en vez de manifestar rabia sana. Reconocer una injusticia y denunciarla se vive como amenaza que paraliza. Las enfermedades de alto riesgo también pueden tener su origen en disfunciones emocionales.
– Cardiopatías. Se origina por el cruce de falsa rabia en vez de tristeza y falsa tristeza en lugar de rabia. Imaginemos que una persona es despedida de su trabajo (pérdida=tristeza), pero expresa ira y rabia resentida. A la vez, descubre que su amigo le ha traicionado (traición=rabia), pero siente tristeza depresiva y resignada. Se calla cuando tiene que reaccionar y se enfurece buscando culpables cuando tiene pararse a encontrar la solución a algo que le preocupa.
– Neuropatías. Se produce por el cruce de falso miedo en vez de rabia y falsa rabia en vez de miedo. Supongamos que una persona es insultada y ofendida (insulto=rabia), pero sufre de un miedo cobarde que le impide defenderse y reactivarse. Por otro lado intuye que su jefe puede suponer una amenaza, pues le impide acceder a un puesto superior (amenaza=miedo) y manifiesta rabia histérica contra él.Se enfrenta como un loco a la amenaza, mientras que cuando debe reactivarse siente un miedo cobarde que le impide pasar a la acción.
– El cáncer y las osteopatías también se deben a disfunciones de la emoción rabia. (ver más detalles en mi libro HAZ QUE CADA MAÑANA SALGA EL SOL).
– El olfato. Hay personas que tienen la rabia muy presente en sus vidas, son muy vitalistas y rebeldes, que poseen un extraordinario radar que les avisa de las mentiras. Es el olfato, porque las mentiras se huelen y a las personas muy manipuladoras y mentirosas se les reconoce porque desprenden un olor desagradable. Si no tienes olfato es porque no tienes rabia. Asume que te niegas a reaccionar y tragas abusos sin darte tu lugar.
Lo relevante es querer saber, es el autoconocimiento como medida para encontrar nuestros fallos y dejar de buscar defectos en los demás. El no querer tomar conciencia ni analizar si nuestros comportamientos son incorrectos, impedirá poner fin a las somatizaciones. Seguiremos culpando a la comida, al aire acondicionado, al polen o a la mala suerte de todo lo que nos pase, cuando a través del uso correcto de las emociones podemos recuperar nuestro equilibrio natural.
Cuando expresamos la rabia de una manera adecuada (ver post: LA RABIA: UNA INYECCIÓN DE VITAMINAS) nos encontramos bien, nos sentimos vivos, encontramos nuestro lugar y experimentamos la energía y vitalidad sintiendo que la salud es nuestro estado natural.
[/fusion_text][/fusion_builder_column][/fusion_builder_row][/fusion_builder_container]
7 comentarios
Así es. Siempre he pensado que no somos un ente dividido entre cuerpo, pensamiento y espíritu, si no que esta todo unido, interconectado, que somos uno y que las enfermedades no son mas que un aviso de lo que no hemos sido capaces de ver por otro medio y resolver. También he leído que si bien antes se pensaba que el cerebro envía una señal al cuerpo rapidísima, en fracciones de segundo, ahora se cree que la respuesta es simultánea, que cada célula de nuestro cuerpo piensa también. Es decir cuando tocamos algo que quema, apartamos la mano a la misma vez que pensamos que eso nos está haciendo daño, no después de haberlo pensado. Dicho esto, creo que cuando una enfermedad se ha instalado fuertemente en el cuerpo, es necesario trabajarlo en el plano que tu dices para solucionar desde la raíz el problema en cuestión y que no se repita pero al mismo tiempo hay que visitar al médico (homeópata o lo que uno decida) para que ayude a restablecer la harmonía en el cuerpo. Me gustaría mucho saber qué piensas tu al respecto.
Por cierto, me gustaría saber también qué pasa con las alergias. Muchas gracias!
Muy interesante tu comentario. La represión de ciertas emociones y los shocks o impactos emocionales que recibimos se acumulan en nuestro interior si no somos capaces de reconocerlos. El síntoma indica que hay algo que averiguar, por eso somos holísticos y el cuerpo, la mente y el espíritu son partes indivisibles de un todo completo que se denomina ser humano. La ayuda médica especialista o la homeopatía, según cada uno decida, deben siempre ser tenidas en cuenta a la vez que cada cual ha de trabajar esas emociones reprimidas de manera que la curación sea no solo más rápida sino que al ir a la causa el problema deje de repetirse y por tanto la enfermedad deje de aparecer.
En cuanto a las alergias casi el 90% son coyunturales. En principio todos somos potenciales alérgicos. Entre el momento en que no somos alérgicos y el que sí, ha pasado algo. Siempre existe un impacto emocional previo en un determinado entorno. Por ejemplo el polen. Estás en el campo, pasa algo que te conmociona, pasa el tiempo, vuelves a un entorno similar y aparece la alergia. Es un aviso de tu inconsciente. Hay algo que se ha quedado grabado. Es necesario pasarlo al nivel de la conciencia. Ser consciente de lo que ha ocurrido y aceptarlo para desbloquearlo, a través de la expresión del sentimiento que tuviste aquella vez. Por decirlo de algún modo, hay que revivirlo y dejarlo resuelto.
La alergia a la leche, tiene que ver con un conflicto con la madre (no me gusta mi mamá, por ejemplo, no quiero su alimento)
Alergia al gluten, se refiere a un conflicto familiar provocado por papá (el pan es un arquetipo del padre)
Alergia al sol, conflicto con papá (ejemplo: necesito el calor de papá y nunca está)
Alergia a algún alimento, por ejemplo mientras comes una fresa, recibes una noticia que te impacta emocionalmente. Probablemente desde ese día sufrirás de alergia a las fresas.
Como ves hay muchas y son muy variadas. Te he comentado algunas a título de ejemplo, pero cada caso hay que tratarlo de manera independiente.
Espero haberte ayudado en algo.
Sí me has ayudado, muchas gracias!
No me cabe duda de que en el organismo todo está conectado, sin embargo, lo que no está claro es cómo está conectado y me temo que no es tan sencillo como decir que si por ejemplo te guardas la ira, terminarás cogiendo un resfriado o ante una pérdida te pones malo de la tripa o lo que sea. Hay un mundo, el mundo bacteriológico y de los virus, que está en constante ataque al organismo y que tiene también su influencia ya que determinados virus o bacterias son mucho más agresivos y fuertes que otros, así que depende de qué te toque, no sólo de que estés fuerte, sano y feliz, según eso, una persona completamente realizada nunca enfermaría y eso no es cierto. Decir que ciertos conflictos son causa de ciertas enfermedades sin estudios que lo corroboren es más bien poco científico y me temo que hay tanta gente sedienta de respuestas que se lo creen todo sin cuestionarlo.
Gracias por tu valioso comentario. Estoy de acuerdo contigo. Hay sinfín de causas por las que enfermamos, yo no entro en la parte científica pues sería una osadía por mi parte. Tan solo hago referencia a las CAUSAS EMOCIONALES que nos hacen ser más propicios a contraer determinadas enfermedades en un determinado momento. En ningún caso pretendo ir más allá.
Un saludo.