¿Puedes recordar cuantas veces te has sentido incapaz de hacer o conseguir algo?Y una vez recordado ¿te suena que te sentías inferior o pequeño porque te estabas comparando con alguien que había conseguido cosas realmente importantes, con alguien de referencia?
Me vienen a la memoria casos de personas de mi entorno:
- Una amiga quería montar un centro de yoga, estaba ilusionada pero no tenía suficientes recursos económicos para crear el espacio que deseaba. Logró con esfuerzo dar sus primeros pasos pero al poco tiempo se enteró que una conocida había montado un centro precioso lleno de luz y armonía. En cuanto lo supo mi amiga se rindió, ella era incapaz, se sentía inferior a la otra persona, nunca lo podría lograr, no valía para ello, su sueño de derrumbó en un minuto.
- Una conocida quería ser divulgadora y dar conferencias sobre un tema que había estudiado con pasión. No tenía experiencia pero consiguió ser invitada a un Congreso. El resto de ponentes llevaban años exponiéndose ante el público, eran profesionales reconocidos. En ese entorno ella se encogió, se sintió pequeña, desfallecieron sus ilusiones. No podía llegar donde su imaginación la había llevado.
¿Cuántas veces has sentido algo así? De repente te das cuenta que NO PUEDES hacer algo que deseas profundamente, NO PUEDES conseguir algo en lo que te has esforzado y preparado, NO PUEDES alcanzar tus metas, tus objetivos se quedan en una ensoñación lejana e inútil porque tú NUNCA PODRÁS lograrlo.
¿Qué es lo que ha pasado? Sencillamente te has comparado y lo has hecho con alguien que también tuvo sus dudas, que también ha tenido que trabajar duro y vencer dificultades, pero que no se rindió, siguió su camino y obtuvo sus resultados. Imaginó, sembró, cuidó y cosechó, pero eso no lo hizo en un momento. En muchos casos son años de paciencia y constancia.
Tú no puedes llegar ahora con tus ilusiones y pretender obtener a la primera el resultado perfecto. Hay una gran belleza en recorrer el camino. Muchas veces te confundirás de sendero y aprenderás a no coger atajos y a procurarte información con anticipación. Otras veces serás impulsivo y bloquearás buenas soluciones, entonces aprenderás la paciencia.
Cada momento que va pasando y no obtienes los resultados deseados son una preciosa inversión en preparación, aprendizaje, mejora, adaptación, obtención de ideas más innovadoras, posicionamiento, incorporación de nuevas personas a tu vida…Son procesos necesarios que te permiten conocerte y crecer.
El sentimiento de inferioridad es una disfunción emocional que se produce al sentir miedo falso y paralizante en lugar de rabia auténtica vitalista y de acción.
- El miedo te dice: no puedes, ríndete, eso no es para ti, quién crees que eres con esos proyectos en mente.
- La rabia te dice: ponte en marcha, llénate de energía, reacciona y no sucumbas ante esa mentira social (creencia) que te hace creer que otro sí y tu no. ¡Ponte en acción, prueba y deshecha, anímate, vive!
Elige siempre enfocarte en la meta que quieres conseguir en lugar de en lo que no podrás alcanzar. Que cuando te compares con alguien digas: «eso es lo que quiero llegar a ser/tener» en lugar de «yo nunca lo podré lograr».
2 comentarios
genial gracias feliz viernes
Gracias a ti Isidro. Me alegra saber que mis artículos gustan y aportan algo de luz.